El hubiera no existe.
Categoría: 3. Humanidades y comportamiento humano.
Hace algunos meses coloqué un texto en este mismo Blog ('Lluvia de ideas') en el que comentaba que si uno camina en una dirección y en un momento dado se detiene, se da media vuelta y mira lo que he dejado atrás en los últimos minutos, verá un paisaje nuevo, que no había visto antes, aunque esté compuesto por los mismos elementos: árboles, si va por un bosque; edificios, si va por una ciudad; llanos, si va por un llano; etc.
Categoría: 3. Humanidades y comportamiento humano.
Hace algunos meses coloqué un texto en este mismo Blog ('Lluvia de ideas') en el que comentaba que si uno camina en una dirección y en un momento dado se detiene, se da media vuelta y mira lo que he dejado atrás en los últimos minutos, verá un paisaje nuevo, que no había visto antes, aunque esté compuesto por los mismos elementos: árboles, si va por un bosque; edificios, si va por una ciudad; llanos, si va por un llano; etc.
De esta manera, lo que uno vio al caminar en una dirección, no será lo mismo cuando se detenga a mirar lo que ha quedado atrás. De esta manera, no tiene sentido decir: ¡Hubiera mirado este bonito paisaje!, porque ese paisaje no lo había visto nunca. Sí había visto los elementos de los que se compone, pero no los había visto desde el nuevo ángulo, pues nunca había avanzado hasta ese sitio.
Bueno, es así como se componen los clisés o clichés. Cuando adquirimos una nueva experiencia, sobre todo si no fue muy agradable, pensamos, o nos hacen pensar, que pudimos haber obtenido mejores resultados de haber actuado de otro modo.
Eso no tiene sentido, pues nunca habíamos mirado desde el punto en que lo hacemos ahora.
Será mejor anticipar o planificar nuestras actividades de la manera en que nos lo manda nuestra experiencia, para evitar, en la medida de lo posible, los sobresaltos y para evitar el eterno tintineo de los especialistas en hablar con clisés.
- Era terriblemente
peligroso dejar que los pensamientos se te fueran, azarosos, cuando te
encontrabas en un lugar público o dentro del radio de la telepantalla. El más
pequeño pensamiento te podía llevar a la ruina. [...]
Jeorge
Orwell, "1984"
Saludos y hasta la próxima.
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